Simiente de Abraham
1Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. 2Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. 3Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.
Genesis 12:1-3
1Después de estas cosas vino la palabra de Jehová a Abram en visión, diciendo: No temas, Abram; yo soy tu escudo, y tu galardón será sobremanera grande. 2Y respondió Abram: Señor Jehová, ¿qué me darás, siendo así que ando sin hijo, y el mayordomo de mi casa es ese damasceno Eliezer? 3Dijo también Abram: Mira que no me has dado prole, y he aquí que será mi heredero un esclavo nacido en mi casa. 4Luego vino a él palabra de Jehová, diciendo: No te heredará éste, sino un hijo tuyo será el que te heredará. 5Y lo llevó fuera, y le dijo: Mira ahora los cielos, y cuenta las estrellas, si las puedes contar. Y le dijo: Así será tu descendencia. 6Y creyó a Jehová, y le fue contado por justicia.
Genesis 15:1-9
1Después le apareció Jehová en el encinar de Mamre, estando él sentado a la puerta de su tienda en el calor del día. 2Y alzó sus ojos y miró, y he aquí tres varones que estaban junto a él; y cuando los vio, salió corriendo de la puerta de su tienda a recibirlos, y se postró en tierra, 3y dijo: Señor, si ahora he hallado gracia en tus ojos, te ruego que no pases de tu siervo. 4Que se traiga ahora un poco de agua, y lavad vuestros pies; y recostaos debajo de un árbol, 5y traeré un bocado de pan, y sustentad vuestro corazón, y después pasaréis; pues por eso habéis pasado cerca de vuestro siervo. Y ellos dijeron: Haz así como has dicho. 6Entonces Abraham fue de prisa a la tienda a Sara, y le dijo: Toma pronto tres medidas de flor de harina, y amasa y haz panes cocidos debajo del rescoldo. 7Y corrió Abraham a las vacas, y tomó un becerro tierno y bueno, y lo dio al criado, y éste se dio prisa a prepararlo. 8Tomó también mantequilla y leche, y el becerro que había preparado, y lo puso delante de ellos; y él se estuvo con ellos debajo del árbol, y comieron.
9Y le dijeron: ¿Dónde está Sara tu mujer? Y él respondió: Aquí en la tienda. 10Entonces dijo: De cierto volveré a ti; y según el tiempo de la vida, he aquí que Sara tu mujer tendrá un hijo. Y Sara escuchaba a la puerta de la tienda, que estaba detrás de él. 11Y Abraham y Sara eran viejos, de edad avanzada; y a Sara le había cesado ya la costumbre de las mujeres. 12Se rió, pues, Sara entre sí, diciendo: ¿Después que he envejecido tendré deleite, siendo también mi señor ya viejo? 13Entonces Jehová dijo a Abraham: ¿Por qué se ha reído Sara diciendo: ¿Será cierto que he de dar a luz siendo ya vieja? 14¿Hay para Dios alguna cosa difícil? Al tiempo señalado volveré a ti, y según el tiempo de la vida, Sara tendrá un hijo. 15Entonces Sara negó, diciendo: No me reí; porque tuvo miedo. Y él dijo: No es así, sino que te has reído.
Genesis 18:1-15
20 Ahora, tomemos a Abraham en el capítulo 12. Ahora, Uds. síganme en el
capítulo. Dios se encontró con Abraham... El era sólo un hombre común. Era un
anciano para empezar, de setenta y cinco años de edad. Así que, hermanos, si
piensan que Uds. están muy viejos para empezar con Dios cuando tienen
cincuenta, o sesenta, setenta años de edad, bueno, Uds. no lo están. Abraham
tenía setenta y cinco años de edad. Su media hermana, con quién él se casó,
Sara, en ese entonces tenía sesenta y cinco años de edad. Y ellos eran
estériles, no tenían hijos. Y Dios le dijo a Abraham: “Yo voy a hacer de ti una
gran nación y te voy a hacer un padre de naciones”, y le dio un pacto. Ahora
bien, en primer lugar, quiero que se fijen que el pacto no únicamente le fue hecho
a Abraham, sino a Abraham y a su Simiente después de él. Ahora, digamos eso juntos.
Ahora nos estamos preparando para un servicio de sanidad. ¿Ven? (La audiencia
repite después del hermano Branham.-Trad.) “A Abraham, y a su Simiente después
de él”. ¿Ven? Ahora bien, lo que hizo Dios por Abraham, Él lo hace por su
Simiente después de él Ahora les voy a probar eso a Uds. esta noche por la
Biblia. Y seguramente que esto afianzará lo que les dije anoche. ¡Noten! A
su... A Abraham (a mi lado derecho), y a su Simiente después de él (de este lado).
21 Yo voy a tomar dos libros, y los voy a poner así, para que Uds. vean. Este es Abraham. Esta es la Simiente después de él. Abraham, y la Simiente después de él. Dios, lo que Él hizo con Abraham, él le juró a Abraham y a su Simiente después de él. Ahora, escuchen atentamente; que no se les vaya a pasar por alto.
“Cuya Simiente sois”, si Uds. están muertos a las cosas del mundo, y han sido vivificados en Cristo, por el Espíritu Santo. “Y si vosotros estáis muertos en Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos según la Promesa”. Eso es la Biblia.
Ahora, ¿Notaron el pacto que Él hizo con Abraham en el capítulo 12 de Génesis? El pacto no fue: “Abraham si tú haces una cierta cosa, Yo haré una cierta cosa” El pacto fue totalmente gracia. No fue: “Si tú haces...” Dios le dijo a Abraham: “Yo ya lo hice”. No es: “Si tú haces una cierta cosa”.
22 Dios hizo un pacto con Adán. Adán lo rompió. Cada vez que Él hace un pacto con el hombre Éxodo 19, Él hizo un pacto… lo rompieron.
Pero Dios, en Su determinación, no por medio de leyes o pactos con el hombre, sino por medio de un pacto con Él mismo, Él estaba determinado a salvar al hombre, porque es Su hijo.
Así que Él no únicamente hizo este pacto, sino que Él juró por Sí mismo. Y un hombre que jura, jura por alguien que es más grande que lo que él es. Y no hay uno más grande que lo que Él es, así que la Biblia dice que Él juró por Sí mismo, para cumplirlo.
Piénselo ahora. Ud. dice: “Bueno, si tan sólo tuviera las bendiciones de Abraham, si solamente tuviera la misma promesa que Abraham tenía…” Ud. sí la tiene, si es de la Simiente de Cristo. Si Ud. está muerto en Cristo, Ud. recibe el Espíritu Santo; Ud. es Simiente de Abraham, porque Cristo es de la Simiente de Abraham. ¿Lo ve Ud.? Eso pone lo interior de nosotros a obrar: fe en Dios.
23 Ahora bien, para ser Simiente de Abraham Uds. nunca retrocederán en una promesa de Dios. Uds. siempre guardarán las promesas de Dios. Uds. permitirán que eso sea verdad sin importarles cualquier otra cosa. Eso es lo que hizo Abraham. No importó lo que alguien más dijo, lo que alguien más haya dicho, eso no es nada. Dios así lo dijo, y eso lo concluye. De esa manera es la Simiente de Abraham…
Ahora observen. ¿Son Uds. Simiente de Abraham? Sea la Palabra de Dios veraz y la de todos los demás mentirosa. ¡La Palabra de Dios! Así que por lo tanto, vean, si vienen a Ella, profesando ser Simiente de Abraham, y recaen, es imposible... Uds. mismos se apartan de Dios, y no queda más sacrificio para su incredulidad. Uds. están acabados. ¿Ven?
24 Ahora bien, Él lo hizo para Abraham. No fue: “Abraham, si tú haces una cierta cosa, Yo haré de ti una gran nación, y te haré padre de naciones”. El dijo: “Yo ya lo hice”. Recuerden que la promesa fue totalmente gracia y no había Ley mezclada en ella en lo absoluto. No había unos “si tu lo haces” en lo absoluto; es absolutamente Dios escogiendo a Abraham.
Ahora, aun si Uds. no están de acuerdo con una parte de esto, solamente considérenlo en oración. Ahora pueden ver, no es lo que Uds. hicieron, lo que Uds. desearon... No fue el deseo de Abraham; él era un pagano. Él provenía de la torre de Babel, allí de los valles de Sanar y de la tierra de los caldeos, y de la ciudad de Ur. Y él era simplemente un hombre común y nada que Abraham haya hecho, ni siquiera eran sus deseos… Pero Dios, por gracia y elección escogió a Abraham. Esa es la manera que Él los escogió a Uds., no es algo que Uds. hicieron, es lo que Él hizo. Ahora recuerden,
es “a Abraham y a su Simiente”.
25 Si Uds. piensan que llegan a ser un ministro o un cristiano, porque la gente habla bien de Uds., o porque se unen a la iglesia, para quedarse en la sociedad, o porque “esta es la iglesia más grande en la ciudad”. Sencillamente se están engañando Uds. mismos. Eso es todo. Uds. son personas miserables, en cuanto al cristianismo.
Dios escoge por elección. Romanos el capítulo 9…el capítulo 8, dice “para que la elección de Dios permaneciese...” Esaú y Jacob, antes que nacieran uno u otro, o que tuvieran la oportunidad de hacer una decisión tocante a lo que iban a hacer, Dios dijo: “A Jacob amé mas a Esaú aborrecí”, porque Dios sabía lo que ellos eran aun antes que el mundo fuera formado. Dios los escogió a Uds. en Cristo antes que aun el mundo llegara a existencia. (La Biblia así lo dice) Puso sus nombres en el Libro de la Vida del Cordero. No cuando Uds. vinieron al altar, sino que Él lo hizo antes de la fundación del mundo. La Biblia así lo dice.
61-0317 El Pacto De Gracias De Abraham
