EL PALOMO MENSAJERO
Aquí, yo tengo una pequeña historia en mi mente que leí en una ocasión de un libro. Ahora, no quiero decir que esto es seguro, pueda que esté en "La declinación de la primera guerra mundial". Yo no estoy muy seguro de eso, entiendan; si Uds. no la encuentran, entonces estoy equivocado. O la leí en un libro ... Hace muchos años. Pero ciertamente fue verdaderamente, una-una-una cosa dramática que sucedió.
Los soldados americanos estaban atrapados con fuego de ametralladoras alemanas, y ellos estaban como en una trinchera. Uds. soldados, me imagino, entienden cómo es que ellos andaban en un reconocimiento en alguna parte. Y ellos fueron atrapados, y sólo les quedaba un poquito de munición. Y los alemanes estaban acercándose en grandes unidades, acercándose por todos lados. Y ellos sabían que a menos que ellos recibieran algo de refuerzo, alguna ayuda, que pronto todos morirían (no había escape); los alemanes venían bajando de la montaña, mirándolos directamente, avanzando directamente hacia ellos de esa manera.
Y sucedió que uno de ellos recordó que él tenía una mascotita, un pequeño pichón. Así que él sabía, que si ese pichón lograba salir de allí, llevaría el mensaje al cuartel general en donde ellos habían estado acampados. Y así que ellos se sentaron y escribieron una nota: "Estamos atrapados en cierta posición, de cierta área. Se nos terminó la munición, en unas cuantas horas tendremos que rendirnos o seremos masacrados". Y ellos prendieron esto, o lo ataron, mejor dicho, en la pata de este palomito, y lo soltaron.
Ahora, él es una ave que le gusta el hogar, así que él...¿Qué es lo que él hace? El regresa al hogar por ... juntarse, encontrar a su compañera. Ella estaba preocupada por él; él tenía que regresar al hogar. Y mientras subía, los alemanes vieron lo que había sucedido. Así que lo que hicieron, ellos le empezaron a disparar al palomo. Y uno de ellos lo hirió con una ametralladora de calibre 30, o una bala, le quebró su pierna. Otro le despedazó una gran porción de su espalda. Su pecho estaba todo golpeado. Una de sus alas estaba mutilada, le habían disparado y arrancado la punta, y volaba de lado. Pero continuó subiendo, y finalmente lo logró. Mutilado, herido, destrozado, golpeado, pero él cayó en el campo con el mensaje. Ese fue un gran palomo.
Pero, ¡oh, hermano!, Isaías 53 nos dice de Uno que descendió del Hogar, y de todo lo que era bueno. Y El fue herido por nuestras rebeliones, El fue molido por nuestros pecados, el castigo de nuestra paz fue sobre El, y por Su llaga fuimos nosotros curados. Enfermedades, supersticiones, y diablos nos tenían atrapados; no había manera de escaparnos; la iglesia había errado; ellas se habían apartado con cosas denominacionales (en Fariseos, Saduceos, y en lavamientos de ollas y sartenes), y la Palabra de Dios llegó a no tener efecto. Pero ese Palomito descendió, y solamente había una cosa que podía suceder: tenía que ser un Redentor. No obstante que estaba herido, destrozado, golpeado, desgarrado, sin embargo El sabía cómo regresar al Hogar. Así que
de la cruz del Calvario en donde ellos lo molieron, lo machacaron, lo desgarraron, como un montón de lobos sobre El, El emprendió Su vuelo desde el Calvario y luego llegó a las puertas del Cielo diciendo: "Consumado es. Consumado es. Están libres. Las enfermedades pueden ser sanadas ahora. Los pecadores pueden ser salvos. El esclavo puede ser libre". Aunque El fue molido y herido, aquella gran batalla allá aun cuando todo estaba en contra de El. ...
EN LAS ALAS DE UNA PALOMA, SHREVEPORT, LA 65·1128 (Servicio vespertino).
