SIMIENTE DE LA SERPIENTE
EL HUERTO DEL EDEN
Pero del fruto del árbol... en medio del huerto dijo Dios: No comeréis
de él, ni le tocaréis, para que no muráis. Entonces la serpiente dijo a la
mujer: No moriréis; Sino que sabe Dios que el día en que comáis de él, serán
abiertos vuestros ojos...
Génesis 3:1-7
Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás
entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho
andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida.
Génesis 3:14
No como Caín, que era del maligno y mató a su hermano. ¿Y por qué causa
le mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano justas.
I Juan 3:12
El proceder de la mujer adúltera es así:Come, y limpia su boca Y
dice: No he hecho maldad.
Proverbios 30:20
Porque hay hijos de Dios e hijos de diablo; por mucho tiempo se estubo
especulando de el pecado oriiginal cuales fueron las causas y medios, si fue
por una fruta o una manzana, siendo en realidad el acto del adulterio, primero
hacia la Palabra conllevado después a la carne, pero revisemos las escrituras
no por puntos teológicos o conceptos doctrinales, si no por medio de la
revelación y conforme a las escrituras que el Señor nos brinda:
Ahora observen la serpiente, esta serpiente que fue primero. Dibujemos
un cuadro de él ahora. El es un tipo enorme. El está entre el chimpancé y el
hombre. Y, la serpiente; el diablo, Lucifer, sabía que esa era la única sangre
que se mezclaría con esta sangre humana, la única persona con la que él podía
tratar. El no podía tratar con el chimpancé, esa sangre no se mezclaría. El no
podía tratar con diferentes cosas. El no podía tratar con la oveja. El no podía
tratar con un caballo. El no podía tratar con ningún animal; él tenía que
tratar con esta serpiente.
Tomémoslo a él ahora y veamos cómo es. El es un tipo enorme, un gigante
prehistórico. Allí es donde ellos encuentran estos grandes huesos, y les
mostraré esto en la Biblia. Ahora observen atentamente. Muy bien. Este enorme
tipo, digamos que él—él era de diez pies de alto [Tres metros de
alto.—Traductor], de hombros enormes; se veía exactamente como un hombre. Y su
sangre; después de venir descendiendo, coincidiendo de un animal a otro.
Uno puede cruzar animales. Y continúa haciéndose una sangre más elevada,
una forma más elevada de vida, una forma más elevada, hasta que sube a la
esfera del hombre. Pero la última conexión aquí, aquí en medio, fue cortada.
¿Cuántos saben que la ciencia no puede encontrar el eslabón perdido? Todos Uds.
saben eso. ¿Por qué? Aquí está, la serpiente. Aquí estaba él, un tipo enorme.
Y el diablo desciende, ahora, él dice: “Yo puedo inspirar”.
Ahora cuando Uds. se ponen a ver a las mujeres, y a actuar con mujeres,
recuerden, Uds. están ungidos por el diablo; no es su propia esposa.
Fíjense, ahora, el diablo descendió y entró en la serpiente. Y él
encontró a Eva en el huerto del Edén, desnuda, y él habló acerca del fruto de
en medio. Y medio significa “centro”, y demás; Uds. entienden, en una
congregación mixta. Y él dijo: “Ahora, es agradable. Es bueno al ojo”.
¿Y qué hizo él? El empezó a hacerle el amor a Eva, y él vivió con ella,
como un marido.
160 Y ella vio que era agradable, así que ella fue y le dijo a su
marido, pero ella ya estaba embarazada de Satanás.
Y ella dio a luz a su primer hijo, cuyo nombre fue Caín, el hijo
de Satanás.
“Ahora”, dicen Uds., “eso está errado”.
Muy bien, simplemente vamos a averiguar si está errado o no. “Y pondré
enemistad entre tu Simiente y
la simiente de la serpiente”. ¿Qué? ¡La simiente de la serpiente!
Ella tenía una Simiente, y él tenía una simiente. “Y El herirá tu cabeza, y tú
le herirás Su calcañar”. Y una herida, allí, significa “hacer una Expiación”.
Ahora allí está su “simiente” de la serpiente.
Ahora, fíjense, aquí salen estos dos hombres.
Ahora, esta serpiente, cuando él se paró allí, este enorme hombre
gigante se paró allí, él era culpable de cometer adulterio con
la esposa de Adán. ¿Dónde está el pecado hoy? ¿Qué hace las cosas
de la manera que lo son hoy en día? Ahora, yo—yo...Ciertamente que
Uds. pueden captar acerca de qué estoy hablando.
Y allí estaba.
Y cuando él lo hizo, Dios dijo, empezó a llamar a Eva y a Adán.
Y él dijo: “Yo estaba desnudo”.
Y El dijo: “¿Quién te enseñó que estabas desnudo?”
Entonces ellos empezaron a, al estilo del ejercito, echarle la culpa a otro.
Dijo: “Pues, la mujer que me diste, lo hizo. Ella fue la que me persuadió”.
Y ella dijo: “¿La serpiente me dio una manzana?” Muy bien, predicador, vuelva
en sí.
Ella dijo: “La serpiente me engañó”. ¿Saben lo que significa engañar? Significa
“deshonrar”. Y ella lo fue. El diablo nunca le dio a ella una manzana. “La
serpiente me ha engañado”.
Y entonces vino la maldición.
El dijo: “Por cuanto obedeciste a la serpiente en vez de a tu marido, tú
le quitaste la Vida al mundo. Y tú—tú multiplicarás tus dolores; y tus preñeces
serán para tu marido”, y demás.
“Y por cuanto tú obedeciste a tu esposa, en vez de a Mí (Yo te tomé del polvo;
la especie más alta), de regreso al polvo irás”.
“Y, serpiente por cuanto hiciste eso, se te quitan tus piernas. Sobre tu pecho
andarás, todos los días de tu vida. Y tú serás aborrecida. Y polvo será tu
comida”. Allí lo tienen. Allí está ese eslabón perdido.
Ahora aquí viene Caín. Observemos las naturalezas. Aquí viene Caín. ¿Qué
es él? El es un negociante astuto. El labra los campos. Sagaz, inteligente;
religioso, muy religioso; observen sus—observen sus atributos ahora. Sólo
muévanse conmigo por unos minutos más.
Aquí viene él. El sabe que él es moral. El quiere ir a la iglesia. El se
construye una iglesia, él se hace una ofrenda. Trae un altar y todo. Construyó
un altar, puso sus flores en él. Puso el campo, los frutos del campo, los
ofreció a Dios. Dijo: “Allí lo tienes, Señor. Yo sé que comimos manzanas, eso
fue lo que lo causó”. Algunos de sus renuevos tienen la misma clase de idea.
Muestra de dónde vino. Trajo sus manzanas, del campo, las colocó allí, dijo:
“Esto hará una expiación”.
Dios dijo: “No fueron manzanas”.
Pero, por revelación espiritual, Abel sabía que era sangre. Así que
trajo un cordero, le cortó su garganta, y murió.
Y Dios dijo: “Eso es correcto. Eso fue lo que lo hizo. Fue sangre”. Uds.
saben de qué sangre estoy hablando. Muy bien. “Fue sangre lo que lo hizo”.
Ahora observen.
Y luego cuando Caín vio que su hermano santo rodador había sido aceptado
delante de Dios, y señales y maravillas estaban sucediendo allí, él se puso
celoso de él. El dijo: “Pararemos esta cosa ahora mismo”. Miren a sus hermanos,
miren a sus hijos, continuando hoy. “Ahora, yo soy más inteligente que lo que
lo es él”, así que él se enojó. ¿De dónde vino el enojo? Podrían decir Uds. que
el enojo...El mató a su hermano. El era un asesino.
¿Podrían Uds. llamar a Dios un asesino? Y Adán era el hijo de Dios. La Biblia
dice, que: “Adán era el hijo de Dios”, ese principio puro allá atrás. Adán era
el hijo de Dios. Y ese celo y envidia, y todo, no podían venir de esa corriente
pura.
Tuvo que venir por otra parte. Y vino a través de Satanás, quien era un
homicida, para comenzar. La Biblia dice que: “El era un mentiroso y un
homicida, para comenzar”. Y allí está. Y él mató a su hermano.
Y ese era un tipo de la muerte de Cristo. Luego, de eso, por supuesto,
El levantó a Set para que tomara su lugar. Muerte, sepultura, y resurrección de
Cristo
58-0928 La Simiente de la
Serpiente - Jeffersonville